Transparencia

Zapatero no tenía autorización del BCE ni del Gobierno para publicar en sus memorias la carta confidencial que le envió Trichet en 2011

En agosto de 2011, José Luís Rodríguez Zapatero, entonces presidente del Gobierno, recibió una carta del Banco Central Europeo (BCE) en la que el entonces gobernador, Jean Claude Trichet, le instaba a realizar una serie de reformas económicas para poner freno al déficit. Aunque fue preguntado por la misiva en el Congreso, Zapatero no quiso desvelar su contenido. Dos años y medio después, ya sin cargo público, el expresidente del Gobierno incluye ese documento en sus memorias, que acaba de publicar, editadas por Planeta.

Pero, ¿esa carta no era “estrictamente confidencial”? ¿El BCE ha dado su consentimiento? ¿Hubo respuesta por parte del entonces presidente? Estas son las preguntas que, tras la publicación de la misiva, planteó David Cabo al BCE a través de Ask the EU, el equivalente a Tu Derecho a Saber para los organismos europeos.

La respuesta llegó el pasado 20 de diciembre y resolvió tres de las dudas: la carta sigue siendo confidencial, el BCE (con el acuerdo del actual Gobierno) no la va a publicar y Zapatero nunca pidió permiso al organismo para incluir la misiva en sus memorias. En paralelo, el BCE responde que no hubo respuesta a la carta por parte del Gobierno durante la segunda mitad de 2011.

La respuesta completa defiende la confidencialidad de la correspondencia entre el BCE y los estados en aras del interés público y, por lo tanto -y tras haber consultado al actual Gobierno- prefiere no publicar de forma abierta la misiva, pese a que forma parte del libro de Zapatero. Además, insiste en su carácter confidencial y aclara que el expresidente nunca pidió permiso para sacar a la luz la información.

Días después, Jean Claude Trichet respondía sobre el tema en una entrevista en El País desde un punto de vista muy distinto: “Siempre pensé que las cartas eran propiedad de sus destinatarios”.

Pese a todo, las palabras del BCE crean una nueva duda: si no tenía permiso para publicarla, ¿qué medidas piensa tomar el organismo europeo contra Zapatero? ¿Tiene previsto, al menos, publicar un comunicado oficial afeando la conducta del expresidente? Esas preguntas forman parte de la nueva petición de información de David Cabo al hilo de la primera, en la que insiste en que se publique de forma oficial la carta para comprobar su veracidad. Estaremos atentos a la respuesta.

Impacto

El Banco Central Europeo, en respuesta a esta petición de David Cabo, ha hecho públicas, aunque su contenido ya era conocido, las cartas que Trichet y Zapatero intercambiaron en 2011, y lo hace tras obtener el consentimiento del Gobierno español.

En la contestación, el BCE clarifica lo siguiente:

La decisión de hacer públicos estos documentos se basa en el tiempo transcurrido desde que las cartas fueron enviadas, en las condiciones económicas y monetarias prevalecientes y en la mejora de la estabilidad del sistema financiero español, como indican los resultados de la revisión del BCE a los balances de los grandes bancos. Al mismo tiempo, **el BCE desea hacer notar explícitamente que con la revelación de estas cartas no se respalda su publicación anterior, hecha sin las autorizaciones del BCE y de las autoridades españolas.

Ese último comentario hace clara referencia a la decisión de Zapatero de incluir la misiva en sus memorias sin pedir permiso.

Además, el BCE hace también pública la respuesta de Zapatero, en la que informa sobre la adopción de medidas de consolidación fiscal para reducir el déficit presupuestario, mayor flexibilidad del mercado laboral, vinculación de los salarios con la productividad y reducción del déficit del sistema eléctrico. Por último, Zapatero pedía al BCE que adquiriese deuda pública española para estabilizar los mercados.

Déjanos decirte algo…

En esta información, y en todo lo que puedes leer en Civio.es, ponemos todo el conocimiento acumulado de años investigando lo público, lo que nos afecta a todos y todas. Desde la sociedad civil, 100% independientes y sin ánimo de lucro. Sin escatimar en tiempo ni esfuerzo. Solo porque alguien tiene que hacerlo.

Si podemos informar así, y que cualquiera pueda acceder sin coste, sin barreras y sin anunciantes es porque detrás de Civio hay personas comprometidas con el periodismo útil, vigilante y al servicio de la sociedad en que creemos, y que nos gustaría seguir haciendo. Pero, para eso, necesitamos más personas comprometidas que nos lean. Necesitamos socios y socias. Únete hoy a un proyecto del que sentir orgullo.

Podrás deducirte hasta un 80% de tu aportación y cancelar cuando quieras.

¿Aún no es el momento? Apúntate a nuestro boletín gratuito.